En este informativo, aprenderás que las microagresiones en el ambiente laboral son comportamientos, comentarios o acciones sutiles y negativas que, aunque a menudo no son intencionados, pueden transmitir prejuicios o estereotipos hacia individuos o grupos específicos.
¿Qué puedo hacer si soy victima de una microagresión laboral?
Si eres víctima de una microagresión laboral, aquí hay algunas acciones que puedes considerar tomar:
- Reflexiona sobre la situación: Piensa en lo que sucedió y cómo te hizo sentir. Reconocer y comprender la microagresión es el primer paso para abordarla.
- Mantén la calma: Puede ser emocionalmente desafiante, pero intenta mantener la calma y la compostura en el momento. Evita reaccionar de manera impulsiva o agresiva.
- Documenta incidentes: Lleva un registro de las microagresiones que experimentes, incluyendo la fecha, hora, lugar y personas involucradas.
- Conoce tus derechos: Investiga las políticas y normativas de tu empresa relacionadas con el acoso y la discriminación.
- Conversa con un superior o recursos humanos: Si sientes que la microagresión es parte de un patrón o que no puedes resolverla directamente con la persona involucrada.
Aquí tienes 10 algunos ejemplos de microagresiones en el ámbito laboral:
- Comentarios sobre la apariencia física: Hacer comentarios sobre el aspecto de alguien, como su peso, ropa o peinado, puede ser una microagresión.
- Suposiciones culturales: Asumir que alguien tiene ciertas creencias o habilidades basadas en su origen étnico, religión o nacionalidad, sin conocer sus experiencias individuales.
- Interrupciones constantes: Ignorar o interrumpir repetidamente a una persona durante una reunión o conversación, lo que puede reflejar falta de respeto hacia su voz o conocimientos.
- Estereotipos de género: Asignar tareas o roles en función del género, como suponer que las mujeres son mejores en labores administrativas o que los hombres son más adecuados para trabajos físicos.
- Desacreditación de experiencias: Minimizar las experiencias de discriminación o dificultades que alguien haya enfrentado, como decir "No creo que eso haya sido tan malo" cuando comparten una experiencia personal.
- Comentarios condescendientes: Hablar con tono condescendiente o paternalista hacia colegas, especialmente si son más jóvenes o tienen menos experiencia.
- Exclusión sutil: No invitar a alguien a eventos sociales o reuniones importantes, lo que puede hacer que se sienta excluido o marginado.
- Bromas ofensivas: Hacer chistes que se basen en estereotipos o prejuicios, incluso si se pretenden ser humorísticos, pueden ser dañinos.
- Desigualdad en el reconocimiento: Dar crédito a algunos empleados por su trabajo mientras se pasa por alto o minimiza las contribuciones de otros.
- Comentarios sobre discapacidad: Hacer comentarios insensibles o ignorantes sobre las discapacidades de alguien, como decir "¿Realmente necesitas esa silla de ruedas?" o "Debes estar exagerando".
Estas son solo algunas muestras de microagresiones, y es importante ser consciente de su existencia para promover un ambiente de trabajo inclusivo y respetuoso.
Dato: Aunque a menudo son acciones aparentemente pequeñas y sutiles, su impacto acumulativo puede ser significativo a lo largo del tiempo.
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